Ballet Contémpora presenta a la Compañía
de Jóvenes Bailarines este próximo 19 de septiembre en la Sala HIC del
CCS a las 8:30 p.m., en su nueva producción original “PALMA Y LAUREL”
con coreografías de Alfa Rodríguez, Elvis Guzmán, Dulce Suriel y Yeira
Genao bajo la Dirección General y Artística de Alfa Rodríguez.



Sinopsis.



Muchos han sido los protagonistas
reconocidos en los libros de nuestra historia, pero son más los que
defendieron el Corazón de la isla, el centro de nuestro escudo.


Numerosas veces esta defensa patriótica
fue liderada por mujeres, mujeres que convirtieron sus afanes de madre,
hija, hermana, amiga en brotes de palma y laurel para cubrir las
lagrimas de los ciudadanos, defendiendo sus derechos por encima de ellos
mismos, bajo la convicción de la lucha por la libertad de las ideas, la
democracia de la igualdad y la defensa de la integridad humana.


La
sociedad fue testigo de cuantos cuerpos combatieron, cuantas almas se
ultrajaron, pero la dignidad se sostuvo en pilares de carne y hueso que
se convirtieron en ejemplo de la nación dentro y fuera de nuestras
tierras. Hoy se conocen nombres y la lista es larga, pero pocos
reconocen sus historias y sus sacrificios tal y cual fueron: María
Concepción Bona, María Trinidad Sánchez, María de Jesús Pina, Juana
Saltitopa, Salome Ureña, Ercilia Pepín, Florinda Soriano Muñoz (Mamá
Tingó), Minerva, Patria, María Teresa y una de ellas aun viva Belgica
Adela Mirabal; son nombres que heredamos de las leyendas de nuestros
recuerdos, sin contar otros que se perdieron en el anonimato y en los
desechos de hombres y gobiernos ansiosos de limpiar sus manchas de las
puntadas que cosen nuestra insignia tricolor.


Estas, cientos más, al igual que hombres
valientes son los responsables de que el lema “Dios, Patria y Libertad”
pueda ser una realidad palpable para la Republica, rendimos tributo a
sus memorias con esta producción que hemos llamado “Palma y Laurel”.


Hemos basado la publicidad de la misma
en imágenes donde el barro cubre los cuerpos, tal como algunas
sociedades latinoamericanas
han sido moldeadas, bajo el velo y el manto que produce el poder en
manos de unos cuantos y la sumisión de otros a sus designios. Además
siendo el barro un elemento característico de nuestra cultura artesanal,
impregnar su sello en esta simbología nos parece acertado, como la
tierra misma en la que han nacido nuestros líderes y héroes y del cual
nacen brotes de vida como los que adornan el escudo de la Republica: La
palma, el laurel; así ha brotado de la arcilla con la cual se ha erigido
nuestra nación, una poderosa fuerza de acción para defender lo que a
puja o no debe ser de todos: el derecho a simplemente ser humanos y
respetados como tal, con libertad intelectual y física, espacio y
dignidad.


No pretendemos en este homenaje ser
narrativos, subversivos y menos aun ser historiadores que recuentan un
momento cronológico, solo deseamos captar el espíritu de almas nobles,
sonadoras y pujantes de sus convicciones
en una danza, en una catarsis de recuerdos, que pueda ser inspiradora a
que las jóvenes generaciones hurguen y lean sus valiosas vidas con el
fin de que prevalezca su legado y se siga defendiendo el logro de tantos
que nos brindaron la identidad de podernos llamar desde hace mas de 168
años: Republica Dominicana “libre e independiente”.


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En las imagenes:


1-Yeira Genao, Dulce Suriel  y Juan Capellan.


2- Alba Guzman, Claritza Ortega, Rusmairy Mercado y Alibelk Moran.


3- Claudia Pimentel, Marlenis Collado, Claritza Ortega, Rusmairy Mercado, Alibelk Moran y Leidy Diaz.


4- Yeira Genao y Juan Capellan.


Fotografias: Alfa Rodriguez.